El Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), con sede en la ciudad de Mar del Plata, es el único organismo encargado de asesorar al Estado Nacional en el manejo de los recursos pesqueros. Dicho asesoramiento es de suma importancia para un manejo sostenible de la pesca y de las comunidades vinculadas a ella, más aún en este contexto de pandemia donde la operatoria pesquera fue declarada actividad esencial. En ese marco, el INIDEP continúa con sus tareas habituales de investigación y asesoramiento, incluso con la realización de campañas en distintos buques. Sin embargo, el salario de lxs trabajadorxs del INIDEP (científicxs, técnicxs, observadorxs, administrativxs y personal embarcado) no es acorde a las exigencias requeridas, llegando al extremo que más de la mitad tienen salarios por debajo de la canasta básica. Esto es contradictorio con una pretendida política del Estado Nacional de jerarquizar el trabajo de ciencia y técnica. Por otra parte, existe una gran asimetría con los ingresos de sectores vinculados a la pesca; por ejemplo, durante 2019 el sector generó exportaciones por US$ 1.848 millones.
El 54% del personal tiene sueldos por debajo de los $50.000
NOTA: en septiembre una familia necesitó de 45.478 para no caer debajo de la línea de pobreza.
La labor de investigación y asesoramiento que realizan lxs trabajadorxs del INIDEP, reconocidxs internacionalmente por sus pares así como por lxs empresarixs que usufructúan los beneficios de la pesca, es fundamental para realizar un manejo sostenible de los recursos pesqueros. Que su trabajo no sea reconocido y valorado económicamente lleva implícita una forma de realizar una política pesquera tendiente a desjerarquizar la investigación científica, a disminuir la capacidad del INIDEP de recolectar información valiosa y hacerla más dependiente de “ayudas privadas” y a dejar librada la actividad pesquera a una auto-regulación sin fundamentos científicos que la rebatan. Esta política ha atravesado los distintos gobiernos que se sucedieron en la Argentina en las últimas décadas, los cuales utilizan la pesca y sus ingresos como como caja recaudadora. Esto va en desmedro de la creación de políticas que beneficien al conjunto de la población, tanto en lo referido a la generación de empleo genuino como en la proporción de alimento de calidad, en un país con altísimas tasas de desempleo y malnutrición.
El reconocimiento salarial para la actividad que realizan lxs trabajadorxs del INIDEP podría ser un primer indicio de cambio en las políticas pesqueras, a fin de tener una institución que esté al ciento por ciento de sus capacidades. De otra manera, los discursos sobre “un gobierno de científicos” y una pretendida “soberanía alimentaria” no dejan de ser sólo palabras. Las autoridades actuales, el Director del INIDEP (Lic. Padín), el Subsecretario de Pesca y Acuicultura de la Nación (Dr. Liberman) y el Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca (Ing. Basterra) son los responsables directos para que se otorgue una mejora salarial sustancial a todo el personal del INIDEP con el objeto de que lxs trabajadorxs no cobren un salario por debajo de la canasta familiar y se jerarquice la investigación científica que allí se desarrolla con un presupuesto acorde a sus necesidades funcionales y logísticas.
Lxs integrantes del Observatorio de Problemáticas Pesqueras de la UNMDP nos solidarizamos con lxs trabajadores del INIDEP en su lucha por salarios que superen la canasta básica. Al mismo tiempo apoyamos su compromiso por el desarrollo de una política de investigación pesquera que reconozca la importancia del cuidado de las pesquerías y el desarrollo sostenible de las comunidades pesqueras.
Foto: quedigital.com.ar